Metas y retos de la UT Cancún BIS para el 2022

ESPECIAL | El Rector de la Universidad Tecnológica de Cancún, maestro Julián Aguilar Estrada, repasa los planes para este 2022. La UT Cancún BIS pasa por uno de los mejores momentos de su historia y las metas giran en torno a consolidar, crecer, avanzar e innovar.
Su sistema de gestión de calidad es revisado continuamente para adaptarse a cambios y desafíos.

Entre las metas globales han figurado desde el inicio: gestionar de manera eficiente, transparente e incluyente los recursos humanos, materiales y financieros; impulsar la investigación científica aplicada y el desarrollo tecnológico; así como establecer proyectos y alianzas interinstitucionales para fomentar el emprendimiento y la innovación, logrando la inserción exitosa de los egresados.
Como visión, es ser una de las instituciones educativas de nivel superior con mayor reconocimiento en el estado por la competitividad de sus egresados, su esquema de internacionalización, su infraestructura tecnológica y sus programas educativos. Así se estableció en 2016 y hoy parece una meta cumplida.
Pero también se enlistan metas particulares, que gracias al gobernador Carlos Joaquín González, entre otras autoridades, serán alcanzadas en beneficio de toda la comunidad educativa.
Las siguientes, son palabras del rector, en la segunda semana de enero:

La primera meta es tener una comunidad educativa sana, con salud, vida y paz. Es prioridad. Hoy cuando el mundo se convulsiona, buscamos para nuestro personal un ingreso seguro, condiciones laborales estables y que se sientan tranquilos, en calma de poder llevar el sustento a sus hogares.

La segunda es la consolidación. Todo lo que empezamos debe mantenerse, no solo es el «boom». Este 2022 deberían integrarse todas las carreras al Modelo BIS (Bilingüe, Internacional y Sustentable), ya son cuatro años de experiencia en ese ámbito. Este año sale la primera generación de Turismo y Gastronomía, por lo que se sumarán Sistemas, Ingenierías y demás.

La tercera es el crecimiento en temas de matrícula. Nuestra capacidad está casi al borde, al límite, pero todavía nos alcanza para atender la demanda creciente: en 2019 sin pandemia crecimos un 4% aproximadamente; en 2020 crecimos un 11%, y en 2021 cerca de un 20%.
Nuestra meta cada año era ingresar 900 alumnos como mínimo. En 2020 hicimos un ajuste para que fueran 990 y la proyección de este año es de mil 300; es decir, un 30% en porcentaje cerrado: de 900 a mil 300. En total, son 3 mil 333 estudiantes en la Universidad para 21 carreras actuales: 11 de TSU y 8 de licenciaturas (con dos de éstas en transición, fluctuantes. Son 19 fijas).
En cuanto a la retención del alumnado, sigue en niveles sorprendentes pese a la pandemia, en torno al 94-95% en Técnico Superior Universitario (TSU), y en licenciaturas sigue siendo de 96-97%. La deserción ha bajado entre 3% y 6% solamente. Pero
Se debe en gran parte al extenso programa de becas, como el programa «Apadrina a un Estudiante», que es una maravilla porque la necesidad estuvo, está y estará. Ese programa no tiene vigencia; y la generosidad de empresarios y el vínculo entre padrino y apadrinado, es una motivación absoluta. Gracias a Dios.
Estamos hablando que el 100% de los universitarios tuvo becas durante la pandemia porque se redujeron las cuotas a la mitad. Ahora, entre becas federales, estatales, municipales, empresariales y las nuestras (deportivas, académicas, de desempeño y/o alimenticias), estamos hablando de un 33% más o menos. Hay quienes tienen dos o tres, siempre y cuando no choquen entre ellas. En total, significan más de 11 millones de pesos por concepto de becas.

La cuarta, en torno a la oferta. A la Universidad le elevamos el nivel con los posgrados. En 2020 lanzamos una nueva carrera, la de Mantenimiento Naval, en 2021 las maestrías y este año podría sumarse otra en el área económico-administrativa, donde tenemos el mayor crecimiento de la matrícula. Hemos crecido como nunca.

La quinta, muy ligada a la anterior, es la calidad educativa, para mantener el 100% de los programas educativos acreditados por organismos externos.

La sexta es la infraestructura. Estamos a la mitad del polifórum, esta semana debe estar colocada la base para el concreto en la parte del techo, y se comienza a poner la malla para que la próxima semana se esté colando. Empezamos la cimentación para las gradas.
El Instituto de Infraestructura Física Educativa de Quintana Roo (Ifeqroo) consiguió 6 millones de pesos el año pasado, este año 10 millones más, y un recurso federal gestionado por nosotros de 25 millones. Justamente esta semana confirmó el nuevo recurso (de 10 millones de pesos) el Director del Ifeqroo, Abraham Rodríguez Herrera.
Queremos concluirlo antes de que acabe la administración estatal; es un plan ambicioso, pero sí podemos lograrlo.

La séptima es la internacionalización. Más allá del bilingüismo y los distintos cursos de idiomas, es fortalecer la movilidad. Hemos enviado estudiantes a Francia, Canadá, y nosotros hemos recibido. El testiminio de quienes participan es increíble así es que vamos a seguir fomentándolo.
Además establecemos alianzas con otras universidades del extranjero, como en el Seminario «Líderes con Visión», uno de los más exitosos que tenemos, que se reiventa ahora en su segunda edición.

Por último, la seguridad. Una meta ansiada. Vamos a cerrar toda la Universidad con barda perimetral, ya avanzada, y estamos con posibilidades de que se termine en todo el sitio. Además de armoniosa, bonita, debe ser siempre segura.

UNA REFLEXIÓN FINAL
Estamos sorprendidos de haber llegado a donde queríamos. Hemos trabajado mucho con los Consejeros, con el nuevo Patronato, con el Consejo de Vinculación, con el Consejo Académico y con la Secretaria Ana Vázquez Jiménez, siempre atenta a la UT Cancún BIS. Estamos hablando de órganos más allá del rector y del Cuerpo Directivo. Son organismos que, buscamos, sean el soporte para avanzar.
Contamos con gente muy comprometida con la Universidad, nuestros docentes son altamente calificados, nuestro personal administrativo está comprometido al 100% y el alumnado consiguiendo sus sueños.