Golpe en la mesa

Marcelo Salinas | En órbita 👉🏾 Al profundizar en la idea de que Morena pareciera no articularse como bancada y el Verde sí, surgen versiones interesantes rumbo al 3 de septiembre, fecha de la instalación de la XVII Legislatura estatal. A prácticamente una semana del estreno, poco o nada se sabe, por ejemplo, de agenda legislativa común, coordinación y comisiones. En el papel, Morena tiene la batuta; en la práctica, el PVEM pide y proyecta. Se polariza paulatinamente el escenario y ya sería un juego de dos solamente.
Cabe recordar que la coalición Juntos Hacemos Historia fue parcial y en ella participaron además Fuerza Por México y el Partido del Trabajo. El primero desapareció por no alcanzar el 3% y el segundo enfrenta contratiempos por las maniobras de Isaac Janix y demás. Por eso se dice que es un juego de dos: Morena y PVEM. La «oposición» a ambas fuerzas está diluida, con un representante. Por ello también se dice que la 4T ha encontrado oposición hacia adentro.
Las preguntas son obvias: ¿No es momento ya de que Morena, el partido mayoritario, asuma el control, la agenda y el posible reparto? ¿Por qué dejar que el aliado -para muchos incómodo- tome las iniciativas y saque ventaja mediática? Si solo Marybel Villegas ha pedido abiertamente el respaldo, ¿no hay más? ¿Buscan una tercera persona que deje de tensar los supuestos bandos de Aldana y Villegas? Son preguntas inevitables por la fecha.
Se ha planteado en este espacio: El Verde aspira tener la Comisión de Hacienda y no ignora la importancia de Puntos Constitucionales y Puntos Legislativos. El primer año (de solo dos) de la Junta de Gobierno y Coordinación Política sería el gran premio. Lo quiere y lo pide. Para ello suma diputados (como Janix) y aliados de ocasión. Morena mira. El quórum para sesionar podría depender más de uno que del otro. Conviene repetir la idea: la oposición es adentro de la 4T, no afuera.
Ya pasó la dificultad que implicó el nombramiento de la dirigencia estatal y ha sido, para los efectos antes expuestos, una semana «perdida» en posicionamiento de temas rumbo al 3. Ese ambiente enrarecido y confuso se vivió por momentos con la instalación de la XVI Legislatura en funciones en ese 2018. Las secuelas de ese relajo son de sobra conocidas. ¿Pinta para lo mismo? Ya veremos.
Morena y su «grupo dominante» para el Legislativo no da el golpe en la mesa que se necesita para poner cada asunto en su lugar. Pese a todo, aún hay tiempo.
La percepción que prevalece, sin embargo, podría cambiar con dos o tres gestos muy políticos.

(OPINIÓN PUBLICADA EN NOVEDADES. VIERNES 26 DE AGOSTO DE 2022).