Marcelo Salinas | En órbita 👉🏾 Quintana Roo es uno de los siete estados que alcanzó una calificación de 100 por ciento en la transparencia de sus presupuestos. El dato lo arroja el Barómetro de Información Presupuestal Estatal (BIPE) 2023 del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), organismo que constituye un instrumento para evaluar la calidad y el nivel de transparencia de la información presupuestal de los gobiernos estatales desde hace 15 años.
La administración de Mara Lezama destaca así en un rubro clave de la rendición de cuentas, que la sociedad valora por todo lo que significa el acceso a la información. Cuando el objetivo es consolidarse en esa materia, es indispensable avanzar en apertura, eficiencia y austeridad, pues con ello se reducen las oportunidades para un mal uso de recursos públicos, la improvisación, el abuso y la ineficiencia.
La contralora Reyna Arceo Rosado enlistó los ítems donde el gobierno estatal cumplió en su totalidad: acceso público; estructura y datos abiertos; armonización contable; poderes y secretarías; recursos a municipios; tabuladores y plazas; deuda pública; recursos federales; subsidios, fideicomisos y otros, así como reasignación y excedentes. Son asuntos, todos, que contribuyen a mejorar la confianza entre el gobierno y la ciudadanía.
Actuar con responsabilidad en el manejo del dinero es un acto de planificación estratégica para un gobierno que aspira transformar en múltiples ámbitos. Los cambios profundos de los que se habla deben pasar indiscutiblemente por permitir entender, dar seguimiento y analizar el uso de los recursos. Difundir acciones y logros como el expuesto es una faceta del acceso a ese tipo de información pública.
La gobernadora Mara Lezama siempre declaró su compromiso con la transparencia presupuestal porque son importantes los beneficios de la buena gestión y la disciplina fiscal para conseguir mejores calificaciones crediticias o mejorar los costos del endeudamiento, entre otros temas.
Es una noticia alentadora tras años de crisis en el área, ya sea por la pandemia o por la deuda heredada de irresponsables administraciones anteriores. En ello radica justamente la trascendencia de cumplir totalmente en un brazo de la transparencia: no sólo por una cuestión de honestidad en el desempeño, ni por una planificación más holgada, sino porque la sociedad necesita verificar que las cosas marchan bien con el dinero de todos.
Se avanza y se transforma de acuerdo con lo proyectado.
(OPINIÓN PUBLICADA EN NOVEDADES.
MIÉRCOLES 2 DE AGOSTO DE 2023).