Marcelo Salinas|En órbita 👉🏽 Desde la Cuarta Transformación han prometido que la atención y el progreso para las mujeres es una prioridad. De hecho, se asume como movimiento feminista también. Asuntos como la despenalización del aborto -muy en boga, y como ejemplo-, no lo interpreta como «discutir derechos» sino conductas y concentra el debate en la tipología penal. Así lo explica Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación. En Quintana Roo, la presidenta Laura Beristain ha levantado diversas banderas de lucha al respecto, encarnando dicha visión de la «4T».
En Playa del Carmen fue inaugurada la primera “Puerta Violeta” del estado, la cual brinda refugio, atención médica, asesoría psicológica y legal gratuitas, comida y resguardo a las mujeres violentadas y sus hijos. Se actúa en respuesta a la Alerta de Violencia de Género, en la que participan de manera coordinada todas las áreas del gobierno.
El eje Solidaridad Humano e Incluyente, a través del Programa Sectorial 1.2 “Solidaridad Seguro para Niñas y las Mujeres”, impulsa la eliminación de las diferentes formas de discriminación y tipos de violencia por motivo de género, con la finalidad de garantizar entornos seguros, con igualdad y justicia. En paralelo, el Instituto de las Mujeres multiplicó su presencia en Playa del Carmen y Puerto Aventuras.
En todo 2020, el Instituto que dirige Mónica Bargas Caporali implementó 51 mil 324 acciones en beneficio de 21 mil 645 personas y, mediante diversas campañas de prevención, se logró un alcance de 300 mil 13 usuarios en las redes sociales. Son datos destacables si se considera que tiene una población de poco más de 333 mil.
La administración de Laura Beristain mete la cuarta marcha, la «4T» como ideología, en estas temáticas del debate público nacional, que acaparan los espacios de análisis y fomentan la participación ciudadana porque les da espacios a sectores históricamente marginados, sin voz muchas veces y frecuentemente ignorados en la toma de decisiones en distintos niveles o ámbitos.
Es relevante comunicar tales directrices en su justa dimensión en el municipio que más crece en población (7.9 es la tasa anual) y con la juventud como segmento mayor: en torno a los 28 años la edad promedio. ¿Por qué? Inculcar el respeto, la empatía y la solidaridad, debe hacerse sin demora ni pretexto. Ello, pese a que no todos comulguen con las premisas del movimiento ni las políticas públicas dirigidas a él.
(OPINIÓN PUBLICADA EN NOVEDADES. VIERNES 29 DE ENERO DE 2021).
