Se lucen en Playa

Marcelo Salinas|En órbita 👉🏽 La tercera visita del presidente López Obrador a Playa del Carmen representa soluciones a demandas históricas y obras con gran impacto. Son 18 edificaciones, entre éstas siete megaobras en distintas colonias, las que son una realidad. Es una buena noticia no solamente para Solidaridad, también para un Quintana Roo en franca etapa de recuperación, porque hechos concretos de tal naturaleza aumentan la confianza de la sociedad y evidentemente de las autoridades. En el acto se confirmaron más recursos económicos para el entorno urbano de las futuras estaciones del Tren Maya.
Es además un golpe anímico favorable para la administración de Laura Beristain Navarrete por todo lo que implica: reivindica una promesa de campaña, de ella y del presidente; en tanto, su actuar se analiza desde ahora con otro cariz político. No pueden ignorarse el contexto preelectoral en curso ni los comentarios favorables del ejecutivo federal hacia el gobierno local, lo cual le inyecta energía a la presidenta municipal, dinamiza a su equipo de trabajo y cambia el escenario de competencia.
Se trata de asuntos relevantes: la escrituración de los terrenos en la «Cristo Rey»; el fin al litigio de 25 años por miles de lotes en la popular «Colosio»; la Ciudad Juventud, un impresionante espacio de aprendizaje, esparcimiento y recreación; el Mercado Mundo de las Piñatas; el Centro Cultural en la Ampliación Bellavista; la Unidad Deportiva Forjadores; el nuevo Centro de Rehabilitación Integral Municipal; el CADI en Misión de las Flores, y 764 acciones de vivienda.
Ampliaciones y mejoras urbanas en más de 10 colonias. Es tan obvio el beneficio social como el provecho político que se obtenga. Es una transformación más allá de la connotación ideológica del concepto, porque es inédita la cantidad y la calidad de construcciones públicas simultáneas como las descritas. Se avanza en la reducción de la pobreza y la marginación, lo mismo que en abatir la apatía y la desesperanza. Son unos 425 millones de inversión total a la vista de todos, que encarnan equilibrio, justicia, integración.
La primera visita de Andrés Manuel como presidente al municipio insigne de la Riviera Maya fue el 23 de junio del año pasado, y la segunda el pasado 2 de febrero. En ambas anunció la ejecución de los proyectos y sus avances. En ese marco se habló de retos y rezagos, los que han sido superados progresivamente, con solvencia. Bastaba un simple tiempo al tiempo.
La gente de Playa fue «premiada». Ha sido fiel al haber votado mayoritariamente en tres contiendas por el mandamás tabasqueño, que se siente en casa. El respaldo es recíproco.

(OPINIÓN PUBLICADA EN NOVEDADES, LUNES 12 DE OCTUBRE DE 2020).