Replegar es una salida

Marcelo Salinas | En órbita >> Según el secretario estatal de Seguridad Pública, Jesús Alberto Capella Ibarra, en las próximas horas se aplicarán acciones más determinantes en Tulum para restringir la movilidad social recurriendo a medidas inclusive más drásticas que en Chetumal. Así lo anunció. Hasta el cierre de esta edición no se conocían.
Horas antes el gobernador Carlos Joaquín González advirtió en Twitter a Othón P. Blanco, Felipe Carrillo Puerto y Bacalar en la zona sur, así como a Tulum en la zona norte, sobre un aumento en la velocidad de contagios. “Extremen precauciones”, recomendó a la población, y lógicamente a quienes velan por el cumplimiento.
Se trata de un repliegue, acaso la única solución posible hoy, cuando la recuperación está en marcha en aquella parte del estado, no hay vacunas disponibles y el semáforo en color naranja permite, en el caso de Tulum, más actividades que en el resto de los municipios mencionados, en color rojo. Es una disposición emergente y servirá como parámetro para otros: Cozumel, Isla Mujeres e incluso regiones de Cancún, donde las alertas no se apagan.
Cordones sanitarios, filtros, toques de queda y otros, son instrumentos persuasivos para una población que se mueve, a veces sin los cuidados suficientes, y que forman parte del ensayo y error explicado en entregas anteriores: Europa, Asia y demarcaciones en Latinoamérica han probado el método durante semanas hasta encontrar fórmulas eficaces de mitigar o controlar la propagación, para sumar actividades a la reactivación.
El proceso de desconfinamiento se debe implementar de una forma planificada, donde la gente conozca las etapas y con mucha pertinencia municipal. Es ideal una campaña en la cual se conozcan procesos, tiempos y beneficios, para no percibir solamente reprimendas o limitaciones.
El espíritu del control de la pandemia, hasta cuando esté disponible una vacuna, es testear, trazar y aislar. Para ello se necesita indicadores de medición, recursos disponibles y tomar decisiones sensatas con oportunidad cuando lo amerite. Tulum es un ejemplo.
Con respecto a la reapertura progresiva, y la preocupación que se ha tenido con la economía, seguirá el debate en torno a si la mejor manera de proteger la economía es encontrar el control del virus, o trabajar, producir y encarar el escenario con los peligros inherentes estando afuera.
En el norte no quieren mirar atrás; aunque si las estadísticas no favorecen, deberán hallar mecanismos de coyuntura que sigan soportando el delicado equilibrio.