Marcelo Salinas | En Órbita >>Es hora de consolidar la estabilidad del Congreso para desplegar la actividad más pura: la legislativa, que implica desarrollar las agendas de fuerzas y representaciones políticas integrantes de la XVI, las cuales coinciden en diversas materias; aunque la de Morena pesa más, tras ser votada por la mayoría el domingo 2 de junio del año pasado.
Han transcurrido cinco meses desde la instalación, casi la mitad del periodo correspondiente para el partido cuya promesa es la Cuarta Transformación de la vida pública. Han encarado múltiples obstáculos y, a juzgar por las señales tanto internas como externas, hay consenso en favor de la estabilidad y la proyección por todo lo que sigue.
Por lógica, quien encabeza esta dinámica es Reyna Arceo Ovando, coordinadora de Morena y presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo). Hoy, y durante el próximo medio año, debiera ser la misión compartida por quienes prefieren el orden al caos, la certeza a la zozobra y la coherencia a la discordia.
Algo es claro: no es lo mismo el sano debate y la oposición responsable al complot que responde a intereses aviesos, de grupúsculos, que aspiran controlar el Congreso, la incubadora de los protagonistas para las elecciones de 2021 y 2022.
En dicho sentido, Durán Ovando, respaldada por la mayoría -más allá de su partido y de sus aliados-, es quien articula los esfuerzos para avanzar con mayor firmeza. No hay otra ni otro representante morenista que concite tal apoyo a estas alturas.
Se han alineada a ella otro diputados, antes indecisos; los mensajes desde el Ejecutivo estatal que esperan más congruencia, aparentemente dirigido a los inconformes, y la postergación del debate “obvio y urgente” sobre el blindaje o no en la Jugocopo, son señales que motivan una reflexión: una vez que la ruta ha sido allanada, hay que caminar. Es decir: las prioridades son trabajar y consolidar, dejando atrás la ambición y la rebeldía.
¿No es, acaso, lo deseable? No sólo desde el mundo político hablan de la deseada estabilidad, también los empresarios, los activistas y la ciudadanía, porque la agenda comprometida en la campaña contiene temáticas favorables. Lo esperable son soluciones a añejas demandas y promulgación de leyes para mejorar. Se abre una nueva etapa en el Congreso, con una activa sede en Cancún, en una semana clave: el próximo día 15 iniciará el segundo periodo ordinario de sesiones, cuando los 25 deberían llegar con bríos renovados.
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