Mano firme en Cancún

Marcelo Salinas|En órbita 👉🏽 Cancún se encuentra en emergencia ambiental por la basura. El Cabildo aprobó por unanimidad, durante la Sesión Extraordinaria número 19 del lunes, la intervención total temporal a la concesión de la empresa Inteligencia México, S.A de C.V. Quienes integran el cuerpo colegiado reconocieron que Benito Juárez se encuentra en una situación de emergencia generada por la acumulación de residuos y ello ocasiona afectaciones a la población.
En esta misma sesión se ordenó girar instrucciones inmediatas para suspender cualquier actividad de la concesionaria en relación con el servicio; asimismo, se instruyó la contratación temporal de vehículos recolectores con el personal suficiente para la óptima recolección total de desechos, garantizando que ésta se realice con criterios de «imparcialidad y honradez» que generen las mejores condiciones para el municipio.
La determinación de intervenir total y temporalmente el servicio público de limpia y disposición es una medida más, de las muchas ya aplicadas, tendientes a resolver uno de los peores problemas del momento, acarreado desde octubre, cuando el gobierno de Mara Lezama sesionó y dictaminó disposiciones similares a las de ahora. Es insostenible la posición de la citada empresa e impresentable el caos provocado por su irresponsabilidad exclusiva.
En el fondo, las y los regidores avalaron el dictamen emitido por el encargado de despacho de la dirección del organismo público descentralizado Solución Integral de Residuos Sólidos Cancún (conocido como “Siresol Cancún”), respecto de las condiciones actuales en la prestación del servicio de recolección y transportación de residuos, tanto sólidos como urbanos, que tiene Benito Juárez.
Para nadie es un secreto: la concesionaria ha resultado un fiasco y dejó tirada su responsabilidad en el peor momento, cuando la emergencia sanitaria por el coronavirus no da margen para errar, probar o cambiar. Ha sido un atentado a las familias y al medio ambiente, lo cual debe ser castigado con severidad. Por su parte, el gobierno municipal agota todos los recursos administrativos y legales antes de elegir una solución de largo plazo.
En este mismo espacio se planteó que la presidenta Mara Lezama ha retomado añejas demandas y encarado a múltiples grupos de presión en beneficio de la mayoría. A días de una «época generadora de basura», reivindica la acusación contra la concesionaria y manda un mensaje preventivo a la gente. Sin dobleces ni titubeos.