La reforma a debate

Marcelo Salinas | En órbita 👉🏾 Se viene un intenso y prolongado debate por la reforma política-electoral presentada por el Ejecutivo federal a la Cámara de Diputadas y Diputados, que ya se analiza en Comisiones. En los próximos días la legisladora federal por Morena, Anahí González, encabezará la difusión en Quintana Roo. ¿De qué se trata? Reformar la Carta Magna con el objeto de adecuar el sistema electoral mexicano.

Las ideas motrices, explica la diputada federal, son ampliar la representatividad y garantizar la pluralidad en los poderes públicos; incorporar el principio de austeridad republicana en el sistema y los partidos; facilitar el ejercicio de los mecanismos de participación ciudadana; fortalecer los órganos electorales, así como homologar los procesos y el método de representación.

Entre las finalidades que más destacan se cuentan: conformar un solo mecanismo electoral nacional con instituciones administrativas y judiciales únicas, bajo el principio de austeridad; elegir mediante voto secreto, directo y universal a las máximas autoridades electorales administrativas y jurisdiccionales, por postulación de candidaturas a cargo de los Poderes de la Unión; eliminar 200 diputaciones federales y 32 senadurías para tener un total de 300 integrantes en la Cámara baja y 96 en la alta.

Además, se ha dicho en la Cámara, limitar el financiamiento de los partidos solamente para gastos de campaña y suprimir el llamado financiamiento ordinario que se les entrega mensualmente; al mismo tiempo, regular las aportaciones de las personas a los partidos y el uso de tales recursos por parte de estos.

La pregunta es cómo se beneficiará la ciudadanía si finalmente es aprobada. La diputada fundadora de Morena Quintana Roo asegura que se facultará a las y los ciudadanos para elegir a las autoridades electorales y que no sean las cúpulas de los partidos las que elijan; se eliminará los intentos de fraude; se dará el derecho para elegir por voto universal a las máximas autoridades de dicho ámbito; se garantizará que sólo existan partidos con base en el sufragio que obtengan; se reducirá el alto costo que los partidos representan al erario, entre otras medidas.

Respecto de los espacios plurinominales: al desaparecer, se permitirá que aquella persona que llegue a la senaduría, a la diputación o a la elección de un cargo público, sea quien efectivamente lleve las voces de las personas que le han elegido, que le conocen, que le escucharon hacer campaña, que tuvieron frente a frente y que presenció la realidad cotidiana.

Será un debate importante de nuestra democracia.