Marcelo Salinas | En órbita 👉🏾 La proyección turística es sorprendente: para Semana Santa el Caribe mexicano rebasaría los niveles prepandemia. El dato duro es que Cancún y la Riviera Maya ya mantienen registros de 80% de ocupación, de un total de 90 mil cuartos aproximadamente entre ambos destinos. Dicho panorama favorable se debe al semáforo verde y las medidas antipandemia, a la promoción y la diversidad de atractivos, pero también a las tarifas accesibles para quienes viajan.
En redes sociales suelen destacar los precios bajos y lo mucho por disfrutar en Quintana Roo. Es un multidestino donde dólares o euros alcanzan sin problema. Por eso a veces les tienta la opción de incrementar los derechos al hospedaje, aunque otros se opongan precisamente por las cifras que lo consolidan como un destino competitivo en todo. Es un tema por debatir constantemente. Lo cierto es que se convierte en un pilar indiscutible de la ocupación y la derrama promedios.
Otros destinos de clase mundial tardarían de cuatro a cinco años en reactivar sus circuitos tradicionales, los que Quintana Roo se retoman con increíble rapidez. En esos mismos videos en redes sociales aparecen testimonios de viajeros frecuentes, quienes aseguran que cuesta menos viajar al Caribe mexicano que recorrer su país. Familias argentinas, chilenas o brasileñas reconocen la ventaja que tiene Quintana Roo en esa variable.
En tiempos volátiles como los actuales, otra variante agresiva o una guerra pueden estropear todos los planes. Por ejemplo, en 2021 llegaron unos 75 mil turistas procedentes de Rusia a México (la mayoría vía Cancún) y para este año calculaban 78 mil. El año pasado fueron 28 mil de Ucrania y para este año estimaron 33 mil antes del conflicto. Por supuesto, estos números se verán afectados. Habrá que recalcular.
Por ello Quintana Roo le apuesta al turismo doméstico y a los circuitos vecinos. De acuerdo con las nuevas tendencias (expuestas con amplitud en una entrega anterior) se prefieren ahora más el viaje corto, seguro, que brinde vivencias únicas, de contacto con la naturaleza y la historia: El estado ofrece todo ello en cortas distancias y, otra vez, a precios asequibles.
El Caribe mexicano sorprende porque es resiliente, fascinante y diverso.