El negocio: digitalizar

Marcelo Salinas|En órbita 👉🏽 «Todo lo que se pueda digitalizar hoy es negocio», contaba un experto en sistemas invitado a una charla virtual sobre las nuevas formas de hacer turismo. Y de hacer negocios en la práctica. Es el momento, insistió repetidamente durante su conferencia.
Desde el repliegue social por las cuarentenas impuestas y los confinamientos voluntarios, las pequeñas y medianas empresas se vieron obligadas a dejar de operar tradicionalmente para enfrentar la propagación del virus y adaptarse a la «nueva normalidad», marcada ahora por distintos hábitos de consumo, mermas y otras realidades en el comercio. En Quintana Roo y el mundo es así.
Ante dicho panorama, algunas se vieron forzadas a reinventarse, encontrando en el mundo digital una opción para crecer y seguir llegando hacia sus “mercados objetivo” frente a las restricciones propias de la crisis. Ventas online, delivery o aplicaciones que masifican un servicio son parte de las alternativas que muchos emprendedores han desplegado para generar ingresos y no quebrar.
Las pequeñas empresas juegan un papel fundamental en la recuperación de las comunidades: representan más de la mitad de los puestos de trabajo formal y son las más afectadas. Las de Quintana Roo lo saben bien; sobre todo aquellas vinculadas a la industria turística, una buena parte de las aún operativas.
¿Qué hacer? De entrada, mejorar internet durante los próximos años. El servicio debe generalizarse en el Caribe mexicano: en parques, domos deportivos, áreas urbanas protegidas, universidades o accesos públicos a playas, por ejemplo, debería ser gratuito y con velocidad óptima. Sin dejar atrás a las poblaciones rurales y más aisladas geográficamente, porque las brechas de todo tipo deben acortarse cuanto antes.
Talento hay para innovar y emprender. Las ganas abundan en determinados sectores poblaciones, como el juvenil. Pero no se puede por ciertas limitaciones. Lo ideal sería brindar cursos, talleres y programas tendientes a potenciar estas materias, en tanto los gobiernos y las empresas multiplican las opciones de conexión masiva sin mayores restricciones.
Los informes de gobierno son una buena oportunidad para que las autoridades se comprometan o lancen buenas nuevas al respecto. Los presupuestos podrían reorientarse, en su justa medida, para atender esta necesidad. Líderes empresariales, algunos presidentes de fundaciones y patronatos, ven posible los financiamientos. Estamos a tiempo.

(OPINIÓN PUBLICADA EN NOVEDADES. VIERNES 11 DE SEPTIEMBRE DE 2020).