Chetumal en riesgo

Marcelo Salinas|En órbita 👉🏾 No hay otro municipio quintanarroense donde Morena tenga tantas dudas como Othón P. Blanco. Es uno de los tres que administra, junto con Benito Juárez y Solidaridad, aunque las cuentas no son alegres para la coalición Juntos Haremos Historia en el capitalino. Es un bastión frágil por culpa de un gobierno ineficiente, que aparece en bajas posiciones estadísticas y con una revuelta en ciernes debido a la candidatura de Luis Gamero Barranco, que a pocos convence.
A lo anterior se suma una investigación en un Proceso Especial Sancionador por violencia política contra las mujeres en razón de género. El Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo) le solicitó a dicha coalición que confirme si Gamero y tres integrantes más de su planilla ocupan algún cargo dentro de tal alianza, pues forman parte de una indagatoria; y en su caso, señale tanto el cargo como el partido respectivo, con la información comprobatoria.
Ahora, el Ieqroo integrará el expediente, y si el Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo) determina que Gamero es culpable, no podría ser candidato a la presidencia municipal. Así de complejo pinta el futuro inmediato para él, y sobre todo, para el partido que lo cobija.
No para allí el asunto, porque es uno de los actores políticos cercanos a la senadora Marybel Villegas y a su esposo, el polémico secretario general del partido, Jorge Parra, quien protagoniza las manifestaciones contra las candidaturas aprobadas (cabe recordar que Villegas no ganó la interna en Benito Juárez), y también contra el Verde Ecologista, aliado de Morena en el actual proceso, lo cual ha molestado a los sectores que sí aceptaron las encuestas y optaron por el consenso. Es decir, Gamero con casi todo y todos en contra.
La ciudadanía chetumaleña sabe premiar y castigar, lo ha demostrado en las elecciones pasadas, cuando fustigó al PRI y al PAN por no administrar eficientemente un municipio con pocos recursos propios. Después favoreció a Morena por la «luz de esperanza». El lopezobradorismo y la «4T» han dado buenas noticias en la capital, aunque no se conocerá hasta el 6 de junio si ha sido suficiente; podrían pesar más las pifias y el incumplimiento de Otoniel Segovia, del que fue su secretario particular.
En el Solidaridad de Laura Beristain y el Benito Juárez de Mara Lezama la realidad es distinta a la de Othón P. Blanco. En estos municipios se ve potente la alianza encabezada por Morena, pero en Othón P. Blanco empiezan a dar excusas, en espera de las resoluciones que podrían tumbar al candidato.

(OPINIÓN PUBLICADA EN NOVEDADES. MIÉRCOLES 24 DE MARZO DE 2021).